En la historia de las Baleares hay una actuación histórica provocada por una guerra mercantilista parecida a la que ahora tenemos con Libia, cual fue el sometimiento de Menorca al Rey Jaime I, que recuerda que la intendencia es fundamental en una guerra. El joven rey catalán que había conquistado la ciudad de Palma tras un asedio corto, de hecho en un par de días, pasaron a cuchillo a más de 25.000 habitantes musulmanes y pero se vio entretenido varios años en las escaramuzas para conquistar los pequeños reductos que se fueron formando en los extremos de la isla.
Tras haber conquistado Mallorca, Jaime I desestimó una invasión directa de la isla vecina por necesitar sus las fuerzas para la conquista de Valencia, ademas que varios de sus aliados le dijeron aquello no estaba en el contrato, por lo que recurrió a una estratagema de disuasión. Envió a una comisión a Menorca a pedir la redición a los musulmanes al tiempo que ordenó encender grandes hogueras en la costa mallorquina que podían ser divisadas desde Menorca, de modo que los musulmanes se creyesen que ahí había un gran ejército preparado para invadirlos. La treta funciono y el 17 de junio de 1231, en la actual localidad mallorquina de Capdepera, se firmo un tratado con el cadí musulmán de la isla de Menorca por el cual permitiendo que la isla de Menorca continuase bajo poder musulmán, pero sometida a sumisión del rey aragonés, bajo el pago de un tributaje.
Y es que el arte de la guerra consiste en tomar posiciones lo más rápidamente posible al menor coste posible, cualquier otra cosa hace imprevisible en que va a derivar la contienda.
La guerra de Libia o cruzada contra Gadafi ha resultado ser una especie de aventura del estilo del camarote de los hermanos march, donde cada uno va a los suyo sin saber muy bien a qué va. Por si no recuerdan de que va el tema de ese genial episodio de la película “Una noche en la opera” (1935) les pongo el video.
Con Gadafi las tretas no han funcionado, entre otras cosas porque tiene de siempre un buen servicio de inteligencia militar y sabe que los “aliados” no van a poner ni pie en tierra ni a pasar con sus aviones mas allá de la zona de exclusión aérea. En realizad toda esta “actividad bélica” tiene un único fin, descartado que quieran la cabeza de Gadafi, y este es la consolidación de un bastión de los opositores de Gadafi al Este de la costa libia que tenga con limites con Egipto.
La guerra de desgaste contra los Gadafi no va funcionar mientras mantenga el sur del país en sus manos, pues las fronteras con con Níger y Chad (el país más corrupto del mundo) le suponen como tener un supermercado en la esquina de su calle, que le proporciona de todo incluyendo mercenarios.
Una guerra donde se gastan millones de euros para destruir un tanque que era viejo no resulta a todas luces llevadera.
Lo peor de todo esto es que si los americanos consiguen, según la prensa inglesa en eso está un hijo de Gadafi, que el dictador libio vuelva a venderles petróleo, algo que al parecer había dejado de hacer para dárselo a los chinos, la ofensiva se desinfla. ¿Será una prueba de ello el trasmitir el mando a la OTAN?
El problema es que va a pasar con el resto de los países de la alianza si tal acuerdo se consolida. Así que mucho me temo que me veo a ZP pagando más por lo mismo.
0 Comentarios.