Ahora que Obama ya ha matado a Osama y cuando muchos se creen que “la PAX “americana va llenar el mundo, el mundo occidental conocido supongo, como en su día ocurriera en tiempos de Cesar Augusto en el año 24 a. C. cuando este declara el fin de las guerras civiles, vienen los alemanes y le declaran la guerra a los pepinos españoles.
Acaso no teníamos bastante con la posibilidad de que el consulado Rubalcaba/Zapatero se entronicen por cuatro años mas en virtud a los malabares de los pactos pos electorales, que tienen que venir los alemanes a jorobar a los cosechadores del pepino verde, ese mismo que es elemento básico y fundamental del gazpacho, alimento de los pobres.
A poco de llegar en mi juventud a Sevilla descubrí varios alimentos que me resultaban desconocidos hasta aquel entonces, el primero de ellos fue el Gazpacho y luego la manteca colorada con la que pringaban allí los panecillos tostados del desayuno. En tal bebida alimenticia entra actualmente como ingredientes los tomates, pepinos, pimientos, cebollas y ajo , todo ellos bien triturado , aunque originalmente no debió de ser así, entre otras cosas porque el tomate y el pimiento se introduce en nuestra cocina después del descubrimiento de américa y la batidora fue inventada por Herbert Johnston en 1908.
Ambas hortalizas y la batidora no existían cuando el pepino llego a nuestros campos, por cierto de la mano de los romanos, esos, que como me decía ayer en un correo Carmen, una amiga mía sevillana de aquel entonces, también trajeran el derecho romano.
Aunque no estoy muy seguro de que fuera así, pero alguien me conto en una ocasión que el gazpacho y la paella eran en realidad un invento de la “asistencia social” de los árabes precisamente porque se popularizan en las épocas de hambruna. El gazpacho era el alimento de las cuadrillas de jornaleros que laboraban en el campo que aprovechaban las hortalizas de las huertas por donde trabajaban, más alguna aportación propia traída para la ocasión, para elaborar mediante el simple procedimiento de moler o machacar los ingredientes en un mortero de madera. El resultado debería de ser una especie de masa de hortalizas menuda que hacían tragable a base de aceite, agua y vinagre. La paella era el resultado de recoger las sobras de la caza de las mesas de los ricos y cocerlas en una mezcla con el abundante arroz de la época a la que se añadía, en los mejores de los casos, alguna que otra especie para darle sabor.
Árabes que lógicamente eran seguidores de las enseñanzas de Abu l-Qasim Muhammad ibn ‘Abd Allāh al-Hashimi al-Qurashi , conocido en nuestro mundo occidental por Mahoma y por tanto considerado el ultimo de los enviados de Dios, lo que de entrada le supone el ultimo trasmisor del mensaje de Dios a los hombres que habrían transmitido sus predecesores, entre los que se contarían Ibrahim (Abraham), Isa (Jesús) y Musa (Moisés).Lo que le hace el poseedor de la verdadera interpretación de las enseñanzas religiosas que se encuentran en la Biblia, que el recitaba en versículos o frase cortas ante sus compañeros, quienes los aprendían de memoria y los transmitían a su vez.
Alguno dice que por eso, por ser de trasmisión oral, y por el hecho de que el Corán, el libro que contiene los supuestos mensajes de Dios a los hombres, fuera terminado de escribir 300 años después de la muerte de Mahoma, que es posible que el mensaje de Dios pudo ser adulterado a conveniencia de quien lo contaba en los orígenes del Islam. A todas luces no se puede por ello afirmar, como se hace, que el texto coránico existente hoy corresponde puntualmente a lo que fue revelado al profeta Mahoma, es decir, las palabras textuales de Alá entregadas a Mahoma por medio del arcángel Gabriel. De hecho esta datado y documentado que Uthman Ibn Affan , Califa y por lo tanto ejerciente del poder político administrativo, que se casó sucesivamente con dos de las hijas de Mahoma, fijó por escrito el texto del Corán, que hasta entonces se transmitía como tradición oral, ordenando al mismo tiempo destruir cualquier edición escrita hecha con anterioridad. Para esta decidió de codificar, estandarizar y transcribir el texto se comisionó a un comité para poder producir una copia estándar del texto.
Añadir a los trozos escritos los recuerdos de varias tradiciones orales y a continuación sacar un texto del que envió copias del texto final a todos los rincones del imperio islámico y ordenar la destrucción de todas las copias que difirieran de la nueva versión, suena a mas bien adoctrinamiento. Vamos a un gazpacho de consignas a lo “libro Rojo” de Mao. Como ocurre con la Biblia, existen varias versiones del Corán, además de este retomar las historias de muchos de los personajes y eventos que aparecen en otros “libros sagrados” , de los judíos y los cristianos (La Torá, La Biblia) y la literatura devocional (Los libros apócrifos y el Midrásh), aunque difiere en muchos detalles. Ciertos personajes bíblicos muy bien conocidos, como Adán, Noé, Abraham, Isaac, Jacob, Moisés, Juan el Bautista y Jesús son mencionados en el Corán como Profetas del Islam. Sin olvidar a la Virgen María (Maryam en árabe), madre de Jesús.
Apreciar que algún predicador norteamericano, con la biblia en la mano, y algún Iman pakistaní, con el Coran en la mano, tienen mucho en común no es nada descabellado sobretodo si ambos muestran una pasión exacerbada, desmedida y tenaz, hacia sus ideas religiosas, pues ambos serán fanáticos y como tales con la conciencia perturbada.
Al fin al cabo todo acaba siendo política, entendiendo la misma como el arte de administrar al pueblo sometido a el control de esa institución tan imprecisa como es el Estado, de ahí que cada día vea mas claro que igual que hay unas normas económicas entre los Estados, de obligado cumplimiento como la Unión Europea esta recordando a Grecia en estos momentos y a España de vez en cuando, que se hace preciso que los Estados se pongan de acuerdo en que es de obligado cumplimiento para todos, bajo pena del aislamiento, el que en los territorios que tienen bajo sus mandatos , se cumplan unos derechos mínimos, como seria los derechos del hombre , que la ONU redacto el año anterior a que yo naciera.
Algo que dicen algunos que si ocurría en los tiempos de la “PAX” de los romanos, siempre que fueras ciudadano romano, no estuvieras esclavizado y no fuera bárbaro o extranjero. Con lo que la conclusión es que creo que lo mejor es que me vaya a la Plaza de España a ver como divagan, eso si en asamblea, los indignados allí acampados haber si encuentro alguna solución a este mundo que nos ha tocado vivir.
(para doña juana que esta cabreada el dia de su cumpleaños)