Una organización tan poderosa como el Gobierno de los EE.UU.  no ha dudado en subirse al carro de los islamista mas integristas o fundamentalistas , esos que quieren hacer la revolución social con el Corán en la mano,  y comenzar a tirar piedras contra el tejado del excéntrico y avejentado Gadafi , uno de los pocos dictadores de talante comunistas que quedan en el mundo, los otros son mis paisanos los Castro y el Chavez venezolano.

En libia no existía un estado de miseria como hay en Marruecos, Túnez o en Egipto , su cinco millones de habitantes, tantos como parados hay en España, vivían por general mejor que el resto de los habitantes del norte de África en una economía sostenida por el petróleo y el turismo.

A quien molestaba pues el clan de los Gadafi, sin duda al pueblo Libio no, pero si a los intereses petrolíferos y estratégicos de sus enemigos políticos, como siempre, los americanos, cuyo departamento de Estado  es eso que supuestamente dirige la señora del señor Clinton.

Hilary, cuyo apellido es una demostración más de que la sociedad americana puede ser la más tecnológicamente más avanzada, pero que mantiene una costumbre o uso social tan arcaico como que las mujeres adopten el apellido de su marico cuando se casa, esto pasan a formar parte de la “familia” de su marido, no sé qué opinaría esto mi querida Leide Pajin.  Pues eso Hilary, representante de la más fiel cultura americana no ha dudado en aliarse con los fundamentalistas islámicos, que normalmente opinarían que una rubia como ella debería de ocultar sus encantos femeninos bajo un burka y sus conocimientos e inteligencia usarlos   para ordenar la cocina de su casa,  en un todos contra los Gadafi.

Me gustaria saber como la señora del señor Clinton justificaria su apoyo a los islamistas fundamentalistas a sus electoras norteamericanas, entre las que se cuentra la señora de este video

Es curioso que la ONU, sin duda en un ejercicio de cinismo,   diga ahora, que están acorralados, que los  Gadafi, que estos  serán investigados y posiblemente enjuiciados por el Tribunal Penal Internacional de La Haya. ¿Dónde estaba la ONU en los últimos 40 años en que los Gadafi reinaban en Libia?

Lo de Libia, por si no se habían dando cuenta, nada tiene que ver con la revolución social que está emergiendo en los países del norte de África, y mucho tiene que ver en los intereses comerciales de las compañías americanas del petróleo, del que junto al gas Libia va sobrada.

Estamos pues asistiendo en directo y desde el salón de nuestra casa  al intento de despojar a los Gadafi de sus bienes petrolíferos, eso sí pagando por los contribuyentes  de a  pie y con la eximente moral de quien “roba al ladrón tiene cien años del perdón”.

Mi temor es que al agitar el avispero del norte de África para conseguir la miel petrolífera se produzca un ataque de las abejas fundamentalistas de forma indiscriminado y al final acabemos todos llenos de picaduras.